Los proyectos de ventilación y climatización consisten en el diseño, instalación y mantenimiento de sistemas que controlan la calidad del aire y la temperatura en edificios, industrias y espacios cerrados. El objetivo es garantizar un ambiente interior confortable, saludable y seguro para las personas que ocupan dichos espacios y, para ello, realizamos lo siguiente:

• Análisis y evaluación: realizamos un análisis detallado del espacio a climatizar y ventilar. Evaluamos factores como el tamaño del espacio, la cantidad de personas que lo ocuparan, las actividades que se desarrollarán en él, y las necesidades de ventilación y climatización específicas.
• Diseño del sistema: basándonos en el análisis realizado, diseñamos el sistema de ventilación y climatización adecuado para el espacio seleccionado. Esto implica determinar la ubicación y la cantidad de entradas y salidas de aire, la selección de equipos de climatización (como acondicionadores de aire, bombas de calor o sistemas de enfriamiento evaporativo), la elección de sistemas de filtración y purificación de aires, y la configuración de controles para regular la temperatura y la humedad.
• Selección de equipos: elegimos los equipos y dispositivos necesarios para el sistema de ventilación y climatización, como unidades de tratamiento de aire, ventiladores, conductos, difusores de aire, filtros y termostato. Además de considerar la eficiencia energética, la capacidad de rendimiento, las necesidades específicas del proyecto, y las normas y regulaciones aplicables.
• Instalación: realizamos la instalación física de los equipos y sistemas. Esto implica montar y conectar los acondicionadores de aire, instalar los conductos de ventilación, ubicar y conectar los difusores de aire, y verificar que todos los componentes estén correctamente instalados y funcionando de manera óptima.
• Puesta en marcha y pruebas: una vez instalado el sistema, realizamos la puesta en marcha, donde comprobamos y ajustamos los parámetros de funcionamiento. Además, llevamos a cabo pruebas para asegurar que la temperatura, la humedad y el flujo de aire estén en los niveles adecuados y que el sistema funcione de manera eficiente.
• Mantenimiento: establecemos un plan de mantenimiento periódico para garantizar el buen funcionamiento y eficiencia del sistema de ventilación y climatización a largo plazo. Esto incluye la limpieza regular de los filtros, la inspección y limpieza de los conductos, la verificación de los niveles de refrigerante y la reparación o reemplazo de equipos dañados o defectuosos.